Los Preparativos 1314-1616

Cuenta la historia, que cuando Felipe el Hermoso toma posesión de las encomiendas templarias en Francia, la comitiva iba llena de carruajes dispuestos a llenarse de tesoros y reliquias, pero cual no sería la desilusión del llamado “Rey Maldito” cuando encontró las arcas de las encomiendas casi vacías. Igual sorpresa se llevaron los reyes de Portugal, España y Alemania. Lo cierto es que el tesoro templario, o era mucho menor de lo que la leyenda suponía, o simplemente había desaparecido.

Tampoco los reyes pudieron encontrar las reliquias que supuestamente los templarios tenían en su poder, ni el Mandylion, ni el santo grial, ni la lanza de Longinus, ni la sindone, ni la vera cruz, ni el arca de la alianza ni mucho menos los planos del templo del Rey Salomon. ¿Acaso era mentira que tuvieran alguna, incluso todas estas reliquias? 

El Santo Grial

La aparición años después de la sindone en el ceno de la familia de uno de los templarios quemados en la hoguera nos da a entender que los tesoros templarios habían sido escondidos. ¿Cómo supieron los templarios repartidos por toda Europa que el Rey de Francia y el Papa harían una cruzada contra ellos, con el tiempo suficiente para esconder las riquezas donde nadie pudiera encontrarlas?